Para muestra un botón

El comentario de esta semana trata sobre nuestra opinión y experiencia después de haber hecho la performance llamada Para muestra un botón.

Todos sabíamos que en proyecto integrado de 1º de bachillerato Miguel organizaba cada año algo diferente, como el año pasado en el que las chicas iban vestidas con burka, pero yo creo que en el fondo casi todos esperábamos que este año Miguel se olvidara de esta “tradición” porque al principio pensar en actuar o ir vestidos de una forma diferente al instituto da bastante vergüenza. Todo empezó un día en el que Miguel nos explicó que tendríamos que hacer una performance representando a personas que vivían en la postguerra y cada uno tendría que buscarse un personaje que podía ser real o ficticio. Aunque esta era la idea original al final todo cambió y se convirtió en una idea que quizás nos daba más vergüenza aún que era pasar un día entero vestido y comportándonos como nuestros personajes delante de todo el instituto. Al principio mucha gente intentó hacer algo para no tener que participar, pero tenias que hacerlo si querías aprobar la asignatura. Yo creo que toda esa gente que no quería participar ahora mismo se sienten orgullosos de haber participado y pienso que hasta volverían a hacerlo. Yo creo que soy una de esas personas que aunque en un principio me dio miedo la idea ahora volvería a participar sin pensármelo, al final te das cuenta de que no pasas tanta vergüenza y además como íbamos todos juntos por los pasillo íbamos riéndonos de nosotros mismos. Creo que esta experiencia también ha ayudado a algunas chicas que están acostumbradas a ir siempre maquilladas y bien peinadas porque piensan que si no van así son feas y pienso que después de vestirse de mujer de la postguerra, con pelos de loca y sin maquillaje han aprendido a apreciarse un poco más a ellas mismas.

Sobre mi personaje decir que elegí a mi abuela porque siempre me ha parecido una persona interesantísima y un modelo a seguir. Cuando tuve que escribir mi historia no me hacía falta preguntarle porque desde siempre me ha contado muchísimas historias sobre su infancia, tiene tantas que está pensando en escribir un libro.

Por último quería decir que me ha parecido una experiencia fantástica, que volvería a repetir sin duda y que Miguel tenias razón cuando decías que después de hacer la performance no nos íbamos a arrepentir.